Nuestra historia

En medio de una sociedad amenazada por múltiples conflictos y con un significativo déficit asociativo, en el año 1996 la construcción de una organización sindical al interior de las fuerzas armadas, enfrentaba no sólo los prejuicios de los sectores menos modernos, progresistas, pluralistas y demócratas del país y el pesimismo de los subordinados, sino también los efectos de una normatividad que negaba

las posibilidades de desarrollar proyectos de unidad de los servidores públicos y aún más si se trataba de empleados y trabajadores adscritos al Ministerio de Defensa Nacional, en cuyas instituciones se consideraba que sindicalizarse era una conducta ilegal y además un acto desleal con los superiores.

Sin embargo, tales circunstancias adversas no constituyeron barreras lo suficientemente infranqueables para que el espíritu asociativo e intrépido de algunos desistiera, y bajo el liderazgo de la psicóloga María Clara Baquero Sarmiento, funcionaria de la Policía Nacional, se dio comienzo a un proceso cultural de defensa de derechos que no pudo llegar en mejor momento para los empleados y trabajadores de la institución. Su reconocido dinamismo personal, su inteligencia social y su mente creativa formada en las tendencias modernas de las ciencias sociales, fueron las bases en las que se diseñó la estrategia inicial del proceso de construcción de la organización sindical.

Sin embargo, la necesidad de hallar los soportes legales necesarios en los que ella no era experta, la llevaron a buscar profesionales del derecho con mayor capacidad de análisis y después de múltiples conceptos jurídicos adversos a su aspiración de crear un sindicato, encontró al ex- magistrado, doctor Ramiro Borja Ávila, experto jurista del derecho constitucional, administrativo y laboral, quien interpretando de manera adecuada las nuevas normas de la Constitución Política expedida en junio de 1991, se dio a la tarea de reflexionar y estudiar la viabilidad jurídica de este proyecto, encontrando que: “A la luz de la nueva Constitución las garantías de asociación sindical están plenamente avaladas para todos los servidores públicos, salvo los militares y los policías uniformados”, escribió el doctor Borja Ávila en su juicioso concepto.

Es así como en el INSTITUTO PARA LA SEGURIDAD SOCIAL Y BIENESTAR DE LA POLICÍA NACIONAL, INSSPONAL, se creó el primer sindicato el cual se llamó ASENUINSSPONAL conformado el 23 de marzo de 1996, inicialmente con 77 valerosos trabajadores de la salud y bienestar social, que ejercían su actividad laboral en esa institución descentralizada.

Muy pronto surgieron enemigos quienes por diversos medios intentaron extinguir este sindicato, pero gracias a la tenacidad y la inteligencia con las que se defendió la organización sindical, no lo lograron; entonces, persistiendo en el empeño, los enemigos de la actividad sindical aprovecharon la expedición de la ley 352 de 1997 para diversos propósitos, entre los cuales estaba el de suprimir el “INSSPONAL” para desaparecer su sindicato, por sustracción de materia.

En vista de lo que estaba sucediendo y antes de que se consolidara esta acción oficial, la doctora María Clara Baquero Sarmiento y el asesor jurídico Ramiro Borja Ávila, crearon otra organización sindical de mayor cobertura, que agrupara ya no solo a los empleados del INSSPONAL, sino a todos los servidores públicos del Ministerio de Defensa, asegurando la existencia del sindicato dada la real imposibilidad de acabar en el estado colombiano, con todas las fuerzas armadas y el Ministerio de Defensa.

Es por esto que el 19 de febrero de 1997, nace la “Asociación Sindical de Servidores Públicos del Ministerio de Defensa, Fuerzas Militares, Policía Nacional y sus entidades adscritas y vinculadas”, denominada como ASODEFENSA. 

Desde entonces la organización sindical ha logrado un alto grado de reconocimiento en el mundo, gracias a su intensa y eficaz defensa de los derechos humanos y laborales de sus asociados. Trabajo que se ha visto vulnerado por las amenazas y atentados contra la vida de la presidente de la organización doctora Maria Clara Baquero, quien, gracias a su liderazgo y perseverancia en estas luchas, ha salido avante.

 También la solidaridad internacional y el acompañamiento fraternal y activo de grandes organizaciones europeas y norteamericanas de trabajadores, como la Internacional de Servicios Públicos (ISP), que reúne a más de 700 sindicatos, que representan a treinta millones de trabajadores en 154 países y territorios, como VER.DI, que es el sindicato más fuerte de Alemania y determinante de la política social europea, e incluso la propia Organización Internacional del Trabajo(OIT), han sido soporte fundamental de la acción de ASODEFENSA en pro de los derechos humanos y laborales. De ahí que, el drama humano que viven nuestros trabajadores haya trascendido fronteras. Un ejemplo de ello, entre muchos otros igualmente importantes, se destaca la intervención del Congreso de los Estados Unidos ante el Gobierno colombiano para reclamar el respeto por la actividad sindical de ASODEFENSA.

Facebook
Twitter